03 marzo 2014

Listas abiertas

Una de las propuestas políticas por las que se ha conocido siempre a Unión Progreso y Democracia es la defensa de una reforma electoral que nos parece fundamental para la regeneración de la democracia; una reforma que incluya factores tan importantes como la supresión de la circunscripción provincial y la implantación de listas desbloqueadas y, en cuanto sea técnicamente posible, abiertas.

Por eso resulta sorprendente leer en una reciente entrevista a Ramon Aguiló que de UPyD no le gusta que “no apueste por las listas abiertas”. Podemos citar los textos, como la ponencia política aprobada en nuestro II Congreso el pasado noviembre:

Para mejorar la representación la nueva ley deberá contemplar el desbloqueo de las listas electorales, de modo que los electores puedan cambiar el orden de preferencia de los candidatos a votar, como paso previo a la instauración de las listas abiertas cuando el desarrollo tecnológico lo haga posible y práctico, garantizando el secreto del voto.

O nuestro programa electoral para las generales de 2011:

Hasta que el desarrollo de las herramientas informáticas permita la introducción sencilla de las listas abiertas, el procedimiento de elección de los Diputados seguirá el principio de listas desbloqueadas, de modo que el elector tenga la posibilidad de alterar el orden de los candidatos en la lista.

Pero, además, los hechos respaldan estas palabras: habiendo podido obtener la consejería que le ofrecían otras fuerzas, nuestro partido prefirió pactar con el PSOE asturiano una reforma electoral para el Principado a cambio de nada; y cuando los socialistas prefirieron acordar con el PP que nada cambiase, UPyD les retiró su apoyo. Muy al contrario, Izquierda Unida, que sí ha defendido a veces la reforma electoral y las listas abiertas, cuando ha tenido la oportunidad de influir decisivamente en un gobierno ha desmentido inmediatamente sus palabras con sus hechos. Como en Andalucía, donde ellos sí han aceptado del PSOE consejerías y presupuestos a cambio de olvidarse de sus promesas electorales.

No es obligatorio estar de acuerdo con UPyD, pero al menos deberíamos discrepar sobre la realidad y no en función de infundios o rumores. Ganaríamos todos. mallorcadiario.com.


No hay comentarios: